El presidente, Donald Trump, no sólo acusó hoy a Canadá sino que incluyó también una amenaza para el vecino país. Trump le reclamó por supuestamente dificultar el comercio de los productores de leche de Wisconsin y otros estados del país, y alertó de que no va a tolerar que eso siga ocurriendo.
“Canadá ha hecho que los negocios para nuestros productores de leche en Wisconsin y otros estados fronterizos sean muy difíciles. No vamos a tolerar eso. ¡Observen!”, dijo Trump en un mensaje en su cuenta personal de Twitter.
Canada has made business for our dairy farmers in Wisconsin and other border states very difficult. We will not stand for this. Watch!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) April 25, 2017
La amenaza de Trump se produce mientras los dos países se preparan para renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), del que también forma parte México y firmado hace más de dos décadas. El TLCAN “es un desastre comercial”, reiteró Trump la semana pasada.
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Precisamente este lunes el Gobierno de Trump anunció su decisión de imponer un arancel del 20 % a las importaciones de madera de conífera procedente de Canadá, tras argumentar que no consiguió llegar a un acuerdo al respecto con el país vecino.
En una entrevista con el diario The Wall Street Journal, el secretario de Comercio, Wilbur Ross, detalló que Canadá ya ha sido notificado de la decisión de Trump y que el arancel se aplicará retroactivamente.
La industria maderera de EEUU se ha quejado durante décadas de que Canadá subsidia a sus productores para vender su madera a precios inferiores a los del mercado.
Hasta ahora las críticas más duras de Trump sobre los efectos dañinos del TLCAN iban para México, pero en los últimos días el mandatario se ha centrado en acusar a Canadá de perjudicar a los agricultores y productores de leche estadounidenses.
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Por otro lado, el presidente prevé firmar hoy una orden ejecutiva en la que ordena a su equipo revisar las políticas y leyes que regulan el sector agrícola del país, con el fin de acabar con aquellas normas que puedan “mermar el crecimiento económico” del “Estados Unidos rural”.