La exsecretaria de Estado y excandidata electoral, Hillary Clinton, arremetió contra el presidente estadounidense, Donald Trump, después de que él pidiera a algunos legisladores demócratas progresistas que «regresen» a sus países de origen.
En un mensaje publicado en su cuenta oficial de Twitter, la exsecretaria destacó que los legisladores son estadounidenses y que tienen derecho y razón en protestar por una administración catastrófica.
«Son de Estados Unidos y tienes razón en una cosa: actualmente su gobierno es una catástrofe total y total», fue el breve mensaje publicado por la excandidata, respondiendo directamente al comentario del presidente.
They're from America, and you're right about one thing: Currently their government is a complete and total catastrophe. https://t.co/NvsnFSN8mb
— Hillary Clinton (@HillaryClinton) July 14, 2019
Los comentarios de Clinton ocurren después de que Trump dijera que los «congresistas demócratas» progresistas «deberían» regresar y ayudar a reparar los lugares totalmente dañados e infestados de delitos de los países de los que provienen «antes de criticar las políticas de los Estados Unidos».
Los mensajes parecían dirigidos a las representantes Ilhan Omar, Rashida Tlaib, Alexandria Ocasio-Cortez y Ayanna Pressley, a pesar de que las tres últimas sí nacieron en EE.UU. Omar nació en Mogadiscio, Somalia, posteriormente su familia huyó de la nación devastada por la guerra y aunque al principio encontraron refugio en Kenia, decidieron emigrar en los años noventas a EE.UU.
El ataque de Trump a las legisladoras de primer año ha provocado un rechazo generalizado de los miembros del Partido Demócrata. La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, condenó los comentarios de Trump al afirmar que «el plan del presidente de ‘Hacer a EE.UU grande otra vez’ siempre ha sido hacer que EE.UU. vuelva a ser blanca», y destacó la importancia de la diversidad para la unidad y la fuerza del país.
Por su parte, el representante Hakeem Jeffries, presidente del Caucus Demórata y miembro del Caucus Negro del Congreso, consideró que Trump es un «incendiario racial» y destacó que todas las representantes han sido democráticamente electas por los ciudadanos estadounidenses.