El expresidente de campaña de Donald Trump, Paul Manafort, quien ha estado involucrado en una gran cantidad de crímenes, ahora ha vuelto a ser señalado por las investigaciones del fiscal especial Robert Mueller, en el contexto de su asociación con la administración de Estados Unidos y con vínculos de inteligencia rusa.
Hasta ahora, el presidente Donald Trump ha negado su unión a Paul Manafort, puesto que este ha sido vinculado a crímenes que llegan hasta lavado de dinero como soborno de testigos, pero la realidad es que Manafort fue su presidente de campaña, al menos por un tiempo, y ahora acaba de ser vinculado de forma oficial al tener contactos con la administración actual del país.
El abogado especial Robert Mueller señaló que el expresidente de la campaña «cometió delitos federales al mentirle a FBI sobre una gran cantidad de temas» que incluso violan su propio acuerdo de culpabilidad.
En estas mentiras, se encuentra su propia asociación con la administración del presidente Donald Trump
El informe que se publicó el viernes detalla que Manafort había declarado que no tuvo comunicación directa o indirecta con nadie de la administración desde que dejó su puesto, pero la realidad es otra. Manafort había contratado a una persona para que hablara en su nombre y se acaba de descubrir su engaño, según reportó The Hill.

El abogado especial reveló en un informe de diez páginas lo siguiente:
«Según un colega de Manafort, el expresidente de campaña presidencial dijo en febrero de 2018 que había estado en comunicación con un alto funcionario de la administración de Estados Unidos hasta la fecha», escribe el reporte.
¿Por qué mentiría Paul Manafort en este asunto?
Después de haber sido acusado y encontrado culpable de haber lavado dinero, de haber sido agente del extranjero y de haber sobornado a testigos, ¿por qué mentiría sobre su contacto con la administración de Donald Trump?
El informe de Mueller revela que Manafort engañó a los fiscales y que tuvo interacciones con Konstantin Kilikmnik (el ruso que dirigió su firma en Ucrania) con quien estuvo asociado en la manipulación de testigos. Se cree que este hombre actuaba en conjunción con el alto mando de Rusia.
Manafort mitió sobre una reunión que tuvo con Kilimnik, también mintió sobre el papel de este hombre y dio «declaraciones inconsistentes» con relación a pagos superiores a los cien mil dólares que le realizó a una firma anónima.
De hecho, los abogados de Manafort además tuvieron reuniones con los abogados del presidente Donald Trump y compartieron detalles sobre las investigaciones de Robert Mueller recientemente y hasta ahora, existe todo tipo de especulaciones a raíz de que Donald Trump aseguró que no descartaba la posibilidad de ofrecerle un perdón al expresidente de campaña.