Hace 3 años atrás su nombre aparecía en todos los medios del mundo, convirtiéndolo en casi una estrella de cine. Es que su hazaña era digna de estar en las grandes pantallas y tanto fue así, que muchas personas consideran que solo un milagro hizo que José Salvador Alvarenga, un salvadoreño que perdió su embarcación mientras pescaba, sobrevivió 438 días en mar abierto.
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Según cuenta el mismo, logró sobrevivir comiendo gaviotas que cazaba con su cuchillo, y hasta llegó a tomar su propia orina. Pero la historia no fue igual para su compañero de pesca, Ezequiel Córdoba, de apenas 22 años de edad, quién murió 4 semanas después de que naufragaran en el medio del océano pacífico.
A pesar de que en su reciente libro titulado «Salvador», relata con detalles la impactante historia de su naufragio, y donde también describe como tuvo que tirar el cuerpo de Ezequiel al mar luego de que este falleciera por causas de desnutrición, la familia del joven difunto no considera que esa sea la verdadera historia.
Ahora Alvarenga enfrenta un juicio por más de un millón de dólares, al ser acusado de asesinar a su compañero de pesca para poder alimentarse y así sobrevivir los 438 días que estuvo sin contacto con tierra firme.