James Comey, exdirector del Buró Federal de Investigaciones (FBI, en inglés) consideró este jueves que el país no está viviendo una “crisis constitucional”, aunque no descartó todos los peligros puesto que acotó que el sistema está siendo probado.
Durante un ayuntamiento de la cadena de noticias de CNN, Comey contradijo los comentarios de algunos demócratas, como el senador de Vermont, Bernie Sanders, que han cuestionado la constitucionalidad del país en el momento actual.
“En realidad no lo creo”, respondió el exdirector al ser interrogado sobre si Estados Unidos enfrenta una crisis constitucional. “Estamos en un momento en el que nuestro diseño constitucional, el genio de nuestros fundadores, va a ser probado, y creo que está preparado”, agregó.

A juicio de Comey, la batalla entre los poderes ejecutivos y legislativos del gobierno se librará en los tribunales. “Una crisis sería si los tribunales de Estados Unidos dijeran: ‘no, señor presidente, debe cumplir con esta demanda’, y él responda que no. Pero no estamos allí”, acotó el exdirector del Buró.
Los comentarios de Comey ocurren después de que varios demócratas, incluyendo a la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y al presidente del Comité Judicial, Jerold Nadler, aseguraron que el país se encuentra en una “crisis constitucional”.
Los demócratas realizaron las afirmaciones después de que el Comité Judicial votara el miércoles para que el fiscal general, William Barr, sea desacreditado por rehusarse a presentar ante el Congreso la versión no redactada del informe del fiscal especial, Robert Mueller, encargado de la llamada “trama rusa”, así como de cualquier material relacionado con la investigación.
En respuesta, la Casa Blanca declaró un privilegio ejecutivo sobre el informe completo de Mueller, en defensa de Barr, alegando que la negativa a entregar al material se debe a que cumplir con la petición violaría las normas judiciales y pondría en riesgo la independencia de las funciones de la fiscalía del Departamento de Justicia (DOJ, en inglés).