¿Eres de los que camina rápido a todas partes y a veces te preguntan por qué lo haces? ¿Te suelen pedir que desaceleres el ritmo porque dejas a todos atrás? Pues existen buenas noticias para ti, ¡vivirás más tiempo que quienes te piden que vayas más lento!
Aunque suene un poco radical y simplista, un grupo de investigadores comprobaron en un estudio reciente, que las caminatas enérgicas te podrían ayudar a vivir mucho más tiempo que aquellos que lo hacen con calma.
¡Y la diferencia es increíble! En promedio, se calcula que una persona puede vivir entre diez o quince años más solo con el hecho de acelerar su ritmo al caminar.
Los investigadores analizaron los hábitos de casi 500,000 personas, todas con más de 50 años, y definieron que una caminata rápida prolonga la vida. A unas 3 millas por hora o 100 pasos por minuto, una persona aumenta su tiempo de vida (y la calidad de este) para el futuro.

El estudio fue publicado por Mayo Clinic Proceedings y demostró que, para una amplia comunidad de personas de diferentes pesos y estaturas, el resultado era muy similar:
«La supervivencia es la misma para los caminantes rápidos para una amplia gama de índices de masa corporal, de 20 a 40», señaló el doctor Francesco Zaccardi, de la Universidad de Leicester, Reino Unido.
De la misma forma, el estudio concluye que quienes tienden a caminar más despacio viven entre diez y quince años menos.
Las mujeres que caminan rápido tendrían una vida útil de 87 años en comparación con los 72 de quienes lo hacen lentamente. De la misma forma, los hombres que caminan rápido tendrían una vida útil de 86, frente a los 65 de quienes lo hacen despacio. ¿Impresionante, verdad?
La diferencia entre ambos grupos es tan grande que muestra un margen de 15 años para las mujeres y 20 para los hombres.
¿Aún quieres caminar despacio?
Independientemente de las condiciones físicas de cada persona, caminar rápido se convierte en una forma de cardio que fortalece el corazón y tiene efectos muy positivos a largo plazo, reveló el portal Healthline.